Casa adosada amb 1 bany a Calle Madroño, Trijueque
Este chalet adosado es de esos lugares que, sin alardes ni excesos, guardan una esencia especial: la sensación de hogar. Con 71 metros cuadrados, cada rincón parece pensado para que la vida ocurra sin prisas, con suavidad, como cuando abres las ventanas por la mañana y el sol te encuentra antes de que tú lo busques. Las tres habitaciones no son solo habitaciones: una puede ser el refugio donde termina el día, otra ese espacio que se convierte en sueños infantiles o proyectos por venir, y la tercera… la tercera siempre sorprende: despacho, cuarto de invitados o ese rincón personal donde guardas lo que más quieres. El baño, único pero íntimo, es de esos en los que los espejos guardan secretos de rutinas tranquilas, duchas largas y aromas que se quedan en el aire. Pero la verdadera magia está afuera. Los 207 metros cuadrados de terreno son como un pequeño universo propio: un jardín donde el tiempo se vuelve más lento, donde el café sabe diferente y donde el viento parece conocerte por tu nombre. Un espacio para plantar, jugar, celebrar… o simplemente para respirar. Este chalet no pretende impresionar; pretende acoger. Es ese tipo de casa que, al cruzar la puerta, te hace sentir que por fin has llegado al lugar donde las cosas buenas pueden empezar a crecer.
- 3 habs·
- 1 baño·
- 71 m²·
- Pàrquing