Cases adossadas de lloguer amb terrassa a Chiclana de la Frontera

Las casas adosadas en Chiclana de la Frontera suelen tener entre 2 y 3 dormitorios, con una superficie media de 100-150 m². Muchas cuentan con jardín privado y plaza de aparcamiento. Además, al estar ubicadas en una zona costera, es común que tengan vistas al mar o a zonas verdes.

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Las urbanizaciones con casas adosadas en Chiclana de la Frontera suelen contar con piscina comunitaria, zonas verdes, áreas de juegos infantiles y, en algunos casos, gimnasio o pista de pádel. Además, están bien comunicadas con los principales servicios y comercios de la ciudad.

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El perfil típico de los inquilinos de casas adosadas en Chiclana de la Frontera suele ser familias con hijos, parejas jóvenes o personas mayores que buscan una vivienda cómoda y con espacios exteriores. También es común encontrar inquilinos que alquilan la casa como segunda residencia para disfrutar de las vacaciones en la costa.

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El alquiler de una casa adosada en Chiclana de la Frontera ofrece varias ventajas, como mayor privacidad y espacio en comparación con un apartamento, así como la posibilidad de disfrutar de un jardín o terraza privados. Además, suelen tener un precio más asequible que las viviendas unifamiliares independientes de la zona.

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Según la información publicada en el portal Fotocasa para julio de 2024, el precio medio de alquiler de una casa adosada en Chiclana de la Frontera es de 1460 euros.

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