¡ Oportunidad ! Piso de 104 m² para reformar a la venta en el municipio de Castro-Urdiales, Cantabria. La vivienda está distribuida en salón-comedor, tres dormitorios, cocina, dos cuartos de baño, terraza y vestíbulo. Además cuenta con piscina comunitaria. Cuenta con suelos de gres, ventanas de aluminio lacadas en blanco, armarios empotrados... Precisa reforma integral para entrar a vivir, pero ofrece muchas posibilidades. Es una planta baja en un bloque con ascensor. Buenas comunicaciones por carretera (N-634) y transporte público, a menos de cinco minutos andando de la parada de autobús de la calle del Ocho de Marzo. Próximo a todo tipo de servicios e infraestructuras como centros educativos (IES Ocho de Marzo), comercios, supermercados, farmacias, zonas verdes (Acantilados de Arcisero), playas (Playa de Brazomar)... SIN COMISIÓN
Preguntas frecuentes sobre la compra de bajos en Castro-Urdiales
Según la información publicada en el portal Fotocasa para julio de 2024, el precio medio de las viviendas en Castro-Urdiales es de 189.318 euros.
Las plantas bajas en Castro-Urdiales suelen tener acceso directo a un patio o jardín privado, lo que las hace muy apreciadas por los compradores que buscan una mayor conexión con el exterior. Además, a menudo cuentan con amplios espacios interiores y buena iluminación natural.
Algunas de las principales ventajas de comprar una planta baja en Castro-Urdiales son la facilidad de acceso, la posibilidad de disfrutar de un espacio exterior privado y la mayor comodidad para familias con niños o personas con movilidad reducida. Además, suelen tener precios más asequibles que las viviendas en pisos.
Los requisitos más comunes para adquirir una planta baja en Castro-Urdiales incluyen contar con un presupuesto adecuado, tener una situación laboral estable y poder demostrar solvencia económica. También es importante considerar los gastos de mantenimiento y comunidad, que suelen ser ligeramente superiores a los de un piso.
El mercado de plantas bajas en Castro-Urdiales se caracteriza por una demanda constante, especialmente entre familias y personas mayores. Debido a la limitada oferta de este tipo de viviendas, los precios suelen mantenerse estables y en algunos casos experimentan ligeros incrementos año tras año.