Vivir en una planta baja en Tossa de Mar tiene varias ventajas. En primer lugar, la facilidad de acceso y la ausencia de escaleras es muy apreciada, especialmente para familias o personas mayores. Además, al estar cerca del nivel del suelo, las plantas bajas suelen tener más privacidad y tranquilidad que los pisos superiores. Por otro lado, el acceso directo al jardín o patio es ideal para disfrutar del buen clima de la zona.