Además del precio de compra de la casa adosada, es importante considerar otros costos como los impuestos de transmisión patrimonial, los gastos de notaría y registro, así como los posibles gastos de reforma o acondicionamiento de la vivienda. También se deben tener en cuenta los costos mensuales de mantenimiento, como la comunidad de propietarios, los suministros y los impuestos locales.