¡ALQUILER DE TEMPORADA! Se alquila acogedora planta baja de 100 m² con jardín privado y acceso a una zona comunitaria ajardinada, con orientación este-oeste, muy luminosa y con una distribución funcional, situada en una finca totalmente reformada con ascensor. La vivienda cuenta con dos habitaciones grandes, dos baños completos, una cocina muy amplia y equipada, un salón-comedor generoso y acceso al jardín privado, ideal para disfrutar del día a día con comodidad. Se entrega totalmente amueblada, lista para entrar a vivir, perfecta para parejas o profesionales que busquen un espacio amplio y confortable. Equipada con climatización por aerotermia (frío y calor), suelos de gres catalán radiante y cerramientos de madera de doble vidrio, lo que garantiza un buen aislamiento y eficiencia energética. Ubicada en la tranquila y bien comunicada zona de Pont Major, a 5 minutos del hospital Josep Trueta y del Barri Vell. ¡Llámanos sin compromiso y ven a visitarla! RENT11
Preguntas frecuentes sobre el alquiler de plantas intermedias en Girona Capital
Según la información publicada en el portal Fotocasa para julio de 2024, el precio medio de alquiler de un piso en Girona Capital es de 985 euros.
Muchos de los pisos en alquiler en Girona Capital suelen incluir servicios como agua, electricidad y calefacción. Algunos también pueden ofrecer internet y TV por cable. Es importante revisar los detalles específicos de cada propiedad.
El proceso de alquiler de un piso en Girona Capital puede variar, pero generalmente toma entre 2 a 4 semanas desde que se encuentra la propiedad adecuada hasta que se firma el contrato. Esto incluye el tiempo para realizar visitas, negociar los términos y completar los trámites necesarios.
Normalmente, se solicita que los inquilinos presenten documentos como nóminas, extractos bancarios, referencias y, en algunos casos, avales o fianzas. Es importante estar preparado con toda la documentación requerida para agilizar el proceso de alquiler.
Sí, suele haber algunas diferencias. Los pisos amueblados a menudo tienen un precio de alquiler más alto, pero pueden ser más convenientes para inquilinos que no quieren tener que comprar muebles. Los pisos sin amueblar suelen tener un precio de alquiler más bajo, pero requieren que el inquilino se encargue de amueblar la propiedad.