En una finca rústica en Granada Capital se pueden desarrollar diversas actividades, como la agricultura, la ganadería, la apicultura o el ecoturismo. Algunas propiedades también cuentan con instalaciones para actividades recreativas como la equitación, el senderismo o la pesca. Estas fincas ofrecen la oportunidad de disfrutar de un estilo de vida más tranquilo y en armonía con el entorno natural.