Esta propiedad se encuentra a 5 km de Villalba, en el corazón de la Terra Chá lucense. La finca cuenta con casi 30.000 m² de terreno propio que se extiende alrededor de una casa de piedra tradicional gallega en perfecto estado de conservación. La vivienda principal está lista para entrar a vivir y se distribuye en dos plantas. La planta baja incluye un gran salón con muros de piedra vista y suelos de tarima, conectado con una cocina equipada con muebles de madera, encimera de granito y cocina de leña tradicional. La planta superior alberga tres dormitorios con techos de madera, un cuarto de baño completo y una galería con vistas al paisaje circundante. La propiedad incluye múltiples construcciones auxiliares: un gran alpendre frente a la casa, un alpendre-leñero trasero, y un garaje integrado con horno de leña y cuarto de baño. Un pozo con abundante agua garantiza el suministro hídrico. El entorno es de absoluta tranquilidad, con la casa en el centro de la finca, rodeada de prados y bosques que crean aislamiento total. El acceso se realiza por camino natural. La ubicación permite acceder a las playas en 50 minutos, y a los aeropuertos de A Coruña y Santiago de Compostela en 80 y 95 km respectivamente.